El entrenador de Hellas Verona, Paolo Zanetti, se presentó ante la prensa con la frente en alto, con la mirada puesta en el próximo desafío: el Atalanta en Bergamo. A pesar de la derrota contra el Monza, Zanetti dejó claro que la squadra está en el camino correcto, y que la grinta veronese no se ha extinguido.
«No soy un pararrayos, soy el entrenador y siempre lo seré, tanto en la victoria como en la derrota», dijo Zanetti con firmeza, respondiendo a las críticas recibidas. «Este trabajo tiene sus cargas y sus recompensas, y siempre defenderé a mi equipo hasta el final. Estoy en la trinchera con ellos, lucho por ellos y siempre los protegeré, así es como estoy hecho.»
Zanetti sabe que el partido contra el Atalanta será una batalla dura. «Tenemos que ir partido a partido», afirmó. «Para mí, todos los jugadores son importantes, todos tienen que luchar por su lugar y aprovechar las oportunidades que se les presenten, como lo hicieron Ghilardi, Belahyane y Lambourde.»
El técnico italiano también mencionó la posibilidad de cambios en la alineación: «Hay que hacer evaluaciones, también porque el martes tenemos otro partido importante». Con la intención de rotar la plantilla, Zanetti explicó: «Algunos jugadores no tuvieron un buen rendimiento en el último partido, también porque venían de jugar 90 minutos con sus selecciones nacionales. No podemos pedirles que jueguen seis partidos en 20 días.»
Con un Atalanta conocido por su potencia ofensiva, Zanetti enfatizó la importancia de la unidad y la defensa: «Contra equipos de alto nivel como este, debemos jugar unidos con una fase defensiva sólida, porque ellos tienen muchos jugadores que pueden marcar», explicó. «Son un equipo dinámico con un entrenador que considero el número uno. Tenemos que trabajar duro juntos, salir al campo con humildad, para limitar el trabajo en equipo del rival, un trabajo bien establecido que lleva años, mientras que nosotros estamos comenzando nuestro camino.»
Zanetti terminó su conferencia con un mensaje de optimismo y determinación: «A veces nos gustaría empatar, pero si puedo elegir, prefiero ganar más partidos y perder otros», comentó. «Creo que el empate también llegará, porque cada punto cuenta. Estoy contento de que mi equipo piense en ganar, incluso arriesgando algo, pero debemos ser equilibrados.»
Zanetti dejó claro que Hellas Verona no se dejará intimidar por los desafíos que se avecinan. La confianza y la grinta son las armas del equipo, que se enfrenta a un Atalanta que se encuentra entre los mejores equipos de Italia.
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