Rotterdam, Países Bajos. Un desastre, lisa y llanamente. Así se puede resumir la decepcionante derrota del AC Milan ante el Feyenoord en la Champions League. La esperada exhibición del ‘Fab Four’, esa nueva delantera estelar compuesta por Pulisic, João Félix, Leão y Giménez, se convirtió en una auténtica pesadilla rossonera. La noche perteneció a Paixão, el brasileño del Feyenoord, quien dejó en evidencia la falta de engranaje y el escaso juego colectivo en el ataque milanista. ⚽
El Milan llegaba al partido con el viento a favor tras victorias convincentes contra la Roma y el Empoli. Sin embargo, esta derrota ante el Feyenoord expone una dura realidad: el ‘Fab Four’ sencillamente no carbura. La magia prometida se desvaneció en el césped de De Kuip. Ni siquiera el error garrafal de Maignan, que regaló un gol al Feyenoord, puede excusar la falta de reacción y la incapacidad del equipo para crear ocasiones de gol durante los 87 minutos restantes.
Leão: Una Sombra de Sí Mismo
Rafael Leão, lejos de brillar, fue una sombra de su talento habitual. Errático, impreciso y sin esa chispa que lo caracteriza, desperdició una ocasión clarísima de gol antes de ser sustituido en los últimos minutos. Su bajo rendimiento contrasta abiertamente con su precio y con las expectativas que genera. ¡Una verdadera lástima!
João Félix: Destellos de Genio, Falta de Cohesión
João Félix, por otro lado, mostró esos destellos de su magia innata que tanto ilusionan. Sin embargo, sus acciones brillantes fueron eminentemente individuales, sin conexión real con sus compañeros. Su talento necesita un contexto, un equipo que lo sostenga, y eso simplemente no existió en Rotterdam.
Pulisic: Apagado por la Intensidad
Pulisic, mermado quizá por problemas físicos, sufrió la intensidad del Feyenoord, mostrándose incapaz de imponer su ritmo y su juego incisivo. Su rendimiento estuvo muy lejos de lo que se espera de un jugador de su calibre.
Giménez: Un Fantasma en el Ataque
Giménez, en un partido que le hubiera brindado la oportunidad de lucirse frente a sus ex-aficionados, pasó completamente desapercibido. Sin un solo disparo a puerta,su presencia en el campo resultó,a todas luces,insignificante.
El Gran Problema: La Falta de Cohesión
El problema más grave, según un Conceição visiblemente frustrado, no reside tanto en las actuaciones individuales, sino en la falta total de cohesión entre los cuatro atacantes. El ‘fab Four’ se movió sin conexión,sin entendimiento,como cuatro estrellas solitarias en lugar de un equipo cohesionado. El equipo parecía más bien un grupo de individualistas, sin la química necesaria para generar un juego fluido y efectivo. La fragilidad y la falta de personalidad del conjunto se pusieron de manifiesto. Parecían turistas perdidos, y no los campeones que se espera que sean.😔
Conceição: ¿Regreso al 4-3-3?
Ante esta situación,el futuro del sistema 4-4-2 se presenta incierto. La decepción de Conceição es palpable, y todo apunta a un posible regreso al 4-3-3, un esquema más probado. La presencia de Musah, un jugador del gusto del entrenador, en el centro del campo, se antoja casi segura. La gran duda ahora es: ¿Leão o João Félix? Por el momento,parece que Leão mantiene la delantera,pero la competencia está que arde. 🔥
El Futuro Incierto
La derrota ante el Feyenoord es, sin duda, un golpe duro, pero también representa una llamada de atención necesaria. El Milan, antes de medirse con el Verona y de nuevo al Feyenoord en la vuelta, necesita encontrar urgentemente su identidad y una forma de sacar partido real a su talentosa plantilla. La falta de cohesión, una característica persistente en las actuaciones del Milan esta temporada, debe ser abordada con urgencia. Esa ausencia de fluidez, un problema que también afecta al equipo, resulta, cuando menos, preocupante.
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