Jean-Pierre Papin, la leyenda que brilló en las filas del AC Milan y el Club Brugge, nos regala su visión del próximo choque de la Champions League entre sus antiguos clubes. En una entrevista con La Gazzetta dello Sport, Papin, quien vistió la camiseta rossonera de 1992 a 1994 y luego jugó un año en Brugge a mediados de los 80, nos ofrece su perspectiva sobre ambos equipos y reflexiona sobre su propia trayectoria.
Con un toque nostálgico, Papin recuerda su etapa en Brugge: «La ciudad sigue siendo apasionada, viviendo por el fútbol con sus dos equipos. Me recuerda un poco a Bérgamo, con el Atalanta: una ciudad pequeña con un estadio cálido 🏟️.» Sobre el Brugge actual, afirma: «Brugge juega con organización y corazón. Dará el 100% hasta el final. No los veo jugar a menudo, pero todos conocemos a Mignolet: sigue siendo un buen portero.»
Al preguntarle sobre la decisión del entrenador del Milan, Paulo Fonseca, de dejar a Rafael Leao fuera del once inicial, Papin le da su aprobación sin dudar: «Sí, envió el mensaje correcto. Bien hecho. Había hecho algo similar en Lille también. Con los jugadores, es importante transmitir mensajes, y si lo haces en el campo… mejor aún.»
Papin, ahora entrenador del segundo equipo del Marsella, comparte su filosofía de juego: «Estoy satisfecho porque somos primeros, con 15 goles marcados y 6 recibidos. Me gusta no encajar goles.» Y añade: «Defiendo en profundidad y contraataco. Tengo jugadores que se adaptan a este estilo de juego, y lo hago sin problemas.»
Sobre la actualidad del Milan, Papin observa: «Es un equipo que aún se está encontrando, no está al 100%. Necesita tiempo, y Brugge llega en el momento justo. Milan es superior: si entra al campo bien, puede ganar fácilmente.»
Resaltando la importancia de un estadio lleno, Papin enfatiza: «Oh, mucho. En mi época, el estadio en la fase de grupos de la Champions League estaba medio vacío, luego se llenaba para las semifinales. Pero para Brugge, espero gente y ruido: los aficionados saben que Milan debe ganar, ellos ayudarán.»
Cuando le preguntan sobre la lucha por el Scudetto, Papin se muestra diplomático: «Este año estoy indeciso. He visto un buen Juve, Milan está volviendo, Inter está a su nivel, Napoli no está mal. Les doy un 25% a todos.»
Papin se permite una nota personal, hablando de su hija Emily, quien tiene lesiones cerebrales: «Ella vive y hace todo con nosotros. Solo que no habla. Nos comunicamos con señas, hemos desarrollado un método con ocho señas básicas, que ella entendió inmediatamente.» Y añade: «En Mónaco, creamos una asociación para ayudar a otros niños con los mismos problemas. Durante treinta años, hemos seguido transmitiendo mensajes y ayudando a la gente. Entiendes que lo más importante en la vida es estar sano.»
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